El tráfico es una realidad que enfrentan las ciudades en todo el mundo y la Ciudad de México no es una excepción. Con millones de vehículos transitando sus calles cada día, la calidad del aire y la movilidad se convierten en desafíos importantes. En un esfuerzo por abordar estos problemas, se implementó el programa «Hoy No Circula», una medida emblemática que busca reducir la contaminación atmosférica y mejorar la circulación vial en la capital mexicana.

¿Qué es el Programa «Hoy No Circula»?

El «Hoy No Circula» es un programa de restricción vehicular que busca controlar la cantidad de vehículos en circulación en la Ciudad de México y Zona Metropolitana. El objetivo principal es reducir la emisión de contaminantes atmosféricos y mejorar la calidad del aire en la región. A través de este programa, se busca disminuir la congestión vehicular y fomentar el uso de formas de transporte más limpias y sustentables.

¿Cómo funciona el Programa?

El «Hoy No Circula» opera mediante la asignación de días específicos en los que los vehículos particulares no pueden circular. El calendario de restricciones se basa en la terminación de las placas de matrícula y el tipo de holograma ambiental que el vehículo tenga. Los hologramas ambientales se otorgan en función de los niveles de emisiones contaminantes del vehículo, con el fin de promover la circulación de vehículos más limpios.

¿Quiénes están Exentos?

Existen ciertas excepciones al programa. Algunos de los vehículos que están exentos de las restricciones son:

1. Vehículos con hologramas «Exento» y «Doble Cero» (que cumplen con los estándares más estrictos de emisiones).
2. Vehículos eléctricos e híbridos.
3. Vehículos de emergencia y servicios públicos.
4. Transporte de carga y transporte público con itinerario fijo.
5. Vehículos de personas con discapacidad.

Beneficios y Desafíos

El programa «Hoy No Circula» ha demostrado tener impactos tanto positivos como desafiantes. En términos positivos, ha contribuido a reducir la contaminación del aire y a crear conciencia sobre la importancia de utilizar medios de transporte más sostenibles. Sin embargo, también ha sido objeto de críticas, ya que puede causar incomodidades para quienes dependen de sus vehículos para sus desplazamientos diarios.

Conclusiones Finales

El programa «Hoy No Circula» es un esfuerzo significativo por parte de la Ciudad de México para abordar los problemas de tráfico y contaminación. Si bien puede generar ciertas incomodidades, es un paso importante hacia la creación de una ciudad más sustentable y saludable para sus habitantes. Como conductores y ciudadanos, es fundamental comprender cómo funciona el programa y cómo podemos contribuir a su éxito mediante el uso responsable del transporte y la adopción de medidas de movilidad más limpias.

Sanción por incumplir el “hoy no circula”

El artículo 47 del Reglamento de Tránsito de la Ciudad de México, indica que los conductores de vehículos motorizados deberán acatar los programas ambientales y no circular en vehículos que tengan restricciones los días y horas correspondientes, quienes incumplan con lo establecido o emitan humo ostensiblemente contaminante sea cual fuere la entidad federativa en la que fueron matriculados, serán sancionados con una multa equivalente a 20, 25 o 30 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA) vigente. Consulta en el siguiente enlace el valor actual de la UMA https://www.inegi.org.mx/temas/uma/.

Ser un buen conductor va más allá de saber manejar, es decir, de solo saber mover el auto. Implica conocer las reglas de tránsito, desarrollar habilidades técnicas al volante y poseer por lo menos conocimientos básicos de física aplicados a la conducción. Se trata también de adoptar una actitud responsable, consciente y prudente que no solo garantice su propia seguridad, sino la de todos los usuarios de la vía. Aquí algunas características clave que distinguen a un buen conductor:

1. Responsabilidad: Un buen conductor comprende la importancia de seguir las normas de tránsito y cumple con ellas rigurosamente. Esta responsabilidad se traduce en respetar los límites de velocidad, detenerse en señales de alto y obedecer todas las regulaciones viales. Así como al no exponer a sus pasajeros a situaciones de riesgo al trasladarlos sin colocarse el cinturón de seguridad o casco en caso de motociclistas. 
2. Paciencia: La paciencia es esencial en el tráfico y en situaciones adversas en la carretera. Un buen conductor evita la agresión al volante, respeta los espacios y se mantiene calmado en situaciones de tráfico congestionado aún si otros usuarios lo insultan. 
3. Conciencia situacional: Está consciente de su entorno y anticipa las acciones no solo de otros conductores, también de ciclistas, peatones e incluso de animales, lo cual es fundamental para evitar siniestros. Un buen conductor está siempre atento a lo que sucede a su alrededor, lo que le permite tomar decisiones rápidas y acertadas.
4. Cortesía: Significa ceder el paso cuando es necesario, usar las señales de giro y mostrar consideración hacia los demás en la vía. La cortesía promueve una experiencia de conducción más segura y armoniosa para todos.
5. Adaptabilidad: Las condiciones de la carretera pueden cambiar rápidamente debido al clima, el tráfico y otros factores. Un buen conductor es capaz de adaptarse a estas condiciones y ajustar su conducción de manera segura y apropiada.
6. Habilidad de comunicación: Las señales y las luces del vehículo son formas de comunicación en la vía. Un buen conductor sabe cómo comunicarse con otros conductores utilizando estas señales de manera clara, efectiva y asertiva.
7. Mantenimiento del vehículo: Mantener  el vehículo en buenas condiciones es esencial para la seguridad al momento de conducir. Un buen conductor realiza regularmente el mantenimiento necesario, como revisar los frenos, los niveles de los líquidos de motor, las luces y el estado de los neumáticos.
8. No conducir distraído: Un buen conductor evita distracciones como el uso del teléfono celular, la comida o cualquier otra actividad que desvíe la atención de la carretera.
9. Respeto por las limitaciones: Conocer tus propias limitaciones es una característica de sabiduría al volante. Si estás cansado, enfermo o emocionalmente afectado, es mejor no conducir. El buen conductor no se confía de sus habilidades pues, aunque estas sean considerables, no bastan ya que en la conducción segura también influyen otros factores como las limitaciones de la vía o del auto que conduce.
10. Mentalidad defensiva: Un buen conductor asume que otros conductores pueden cometer errores. Estar preparado para reaccionar ante situaciones inesperadas puede evitar hechos de tránsito.

       Plus: Conocimiento de Física Aplicada: Uno de los aspectos menos reconocidos pero igualmente importante para ser un buen conductor es tener conocimientos básicos de física aplicada a la conducción. La comprensión de conceptos como la inercia, los pesos y las fuerzas g, así como la dinámica del vehículo, puede marcar la diferencia en la forma en que un conductor aborda diversas situaciones en la carretera. Por ejemplo, entender cómo funciona la inercia puede ayudar al conductor a anticipar la distancia de frenado necesaria en diferentes condiciones, mientras que el conocimiento de las fuerzas g pueden influir en cómo tomar curvas de manera segura y eficiente. Además, comprender la dinámica del vehículo puede permitir al conductor ajustar su conducción según el tipo de terreno o las condiciones climáticas. Un conocimiento básico de física aplicada contribuye a una conducción más informada y por tanto segura, ayudando a prevenir siniestros.

Un buen conductor no solo se preocupa por llegar a su destino, sino por hacerlo de manera segura y responsable. Cultivar estas características en tu estilo de conducción no solo te beneficiará a ti, también contribuirá a crear un ambiente vial más seguro y agradable para todos. Recuerda, ser un buen conductor es una responsabilidad que va más allá de la carretera.
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También conocido como acuaplaneo o hidroplaneo, es diferente al efecto lubricante que produce el agua entre los neumáticos y el suelo, el aquaplaning tiene causas y consecuencias más graves que esto y requerirá de maniobras especiales para librar la situación victoriosamente. 

¿Cómo se forma?

Al ser la capa o cantidad de agua sobre la calzada superior a la que los neumáticos pueden desalojar, el agua no desalojada se acumula delante del neumático formando una ola que, al no poder ser evacuada, ejerce sobre la rueda una fuerza mayor a la que ejerce la rueda contra el pavimento, levantándose del suelo, momento en el que comienza el aquaplaning. 

Consecuencias

• Debido a la presión del agua ejercida entre el asfalto y las llantas, estás pierden contacto con el suelo y por tanto la adherencia, deslizándose sobre el agua, lo que vuelve al vehículo incontrolable. 

• El conductor pierde el dominio sobre el vehículo porque no le “obedece” al girar el volante. La dirección, que literalmente está flotando, gira las ruedas orientándolas hacia dónde se quiere ir pero la trayectoria del vehículo no se altera.

• Al frenar, las ruedas pueden bloquearse fácilmente (salvo que disponga de sistema electrónico que lo evite), lo que hace al vehículo aún más ingobernable. 

Solución

• Reducir la velocidad a aquella que permita a los neumáticos desalojar bien el agua y tener contacto con terreno firme. Al inicio solo dejar de acelerar, no frenar intempestivamente.

• Si circulas en línea recta, mantén en línea el volante y no lo gires de manera brusca, tomalo con firmeza, pero sin rigidez. 

• Si circulas en curva, deja de acelerar gradualmente y trata de mantener la trayectoria que ya tenías antes aquaplanear, sin movimientos pronunciados. 

Anticípate 

Cuando detectes charcos de agua evita pasar sobre ellos, ya sea dejándolos entre las ruedas o a un lado, siempre que sea posible debido al tráfico y no se creen situaciones de entorpecimiento o peligro.

Cuando circular sobre la capa de agua es inminente

Si abordas el charco con ambas ruedas (frontales) al mismo tiempo, solo sentirás la retención de velocidad y posteriormente la pérdida de adherencia o flotación de los neumáticos, en su caso.

Si abordas el charco sólo con las ruedas de un lado, sentirás en el volante un tirón hacia el lado del charco, para desviarse hacia el lado contrario si se produjera el «aquaplaning».

Cuando un tramo de pavimento esté anegado de agua, si cruzas o no dependerá de la cantidad y velocidad del agua de la zona. Está decisión debe basarse en si el agua está estancada o tiene corriente, la velocidad que pueda tener esta corriente es fundamental, pues la fuerza que ejercerá sobre tu auto puede llegar a ser muy grande (velocidad al cuadrado) y proporcional a la superficie de empuje (entre más ancha la llanta más se favorece el aquaplaning).

De lo anterior, surge otro factor a tener en cuenta, tanto si el agua tiene corriente o está estancada, la profundidad también es importante, tan importante como para decidir no pasar en el supuesto de superar la altura del chasis y mejor esperar a que disminuya la profundidad. 

No dejes de acelerar

En caso que decidas incursionar en la gruesa capa de agua, debes tener en cuenta lo siguiente: existe riesgo que el agua sea succionada hacia el motor si la velocidad es demasiado baja. Mantén una aceleración constante, esto ayuda a generar un flujo continuo de gases hacia el exterior a través del sistema de escape, lo que reduce la posibilidad de que el agua ingrese y potencialmente cause daños al motor. 

Enfrentar el aquaplaning exige una combinación de conocimiento, precaución y habilidad por parte del conductor. Reconocer las causas, consecuencias y maniobras adecuadas es esencial para mantener el control en situaciones de riesgo. En SAENZ, nos ocupamos en brindarte información de alto valor que, si bien esperamos nunca pases por una situación así, es mejor estar preparado. 

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Las condiciones meteorológicas o ambientales adversas influyen notoria y negativamente en la conducción, lo que exige al conductor adoptar precauciones técnicas especiales para garantizar la seguridad ya que las superficies resbaladizas y la visibilidad reducida aumentan el riesgo de siniestros viales hasta en un 30%. Las condiciones desfavorables que ocurren con más frecuencia son: lluvia, niebla, hielo, nieve, viento, humo o polvo e incluso el sol y el calor. 

Circulan algunos consejos, recomendaciones (a medias), mitos e incluso mentiras, sobre los peligros y medidas que deben respetarse al conducir bajo condiciones meteorológicas adversas, en este artículo nos centraremos en la lluvia y nos encargaremos de explicarte a detalle los consejos ya existentes, te otorgaremos nuevos y te brindaremos un enfoque mucho más amplio sobre el tema. 

Las demás condiciones desfavorables se abordan a profundidad en nuestro curso teórico en línea, Conducción preventiva, domina a nivel experto esta área de la conducción desde la comodidad de tu hogar y al finalizar recibe constancia de participación o, si eres parte de una empresa que contrató el curso para su equipo, recibe la Constancia de competencias laborales o DC-3 del curso y mejora tu CV.

¡Entremos en materia!

Las primeras gotas, las más peligrosas

Es al caer las primeras gotas cuando más precauciones deben adoptarse. Al mezclarse el agua con el polvo, arenilla, gasolina, grasa y otros restos depositados en el pavimento, se produce un barro que convierte el firme en una superficie sumamente deslizante, lo que significa un serio peligro para la seguridad de la circulación, sobre todo después de un largo período sin haber llovido y hasta que la calzada queda limpia tras el agua haber arrastrado esta suciedad hacia las alcantarillas.

Efectos de la lluvia sobre la conducción

1. Reduce la adherencia. La presencia de lluvia en la carretera genera una película de agua en la superficie del pavimento. Esta película interfiere entre los neumáticos y la calzada, disminuyendo la fricción y, por tanto, reduciendo la adherencia. No confundir esta descripción con los efectos del aquaplaning, en otro artículo explicamos qué requisitos deben cumplirse para considerar que estamos en presencia de aquaplaning y cómo actuar para salir con bien de la situación.

2. Afecta la visibilidad. Esto ocurre por varios factores, por sí solo cada uno afecta considerablemente la visibilidad, al juntarse todos, puede perderse por completo la visión del exterior, analicemos uno a uno:

• Empañamiento de cristales: esto se debe a la diferencia de temperatura y humedad entre el interior y el exterior del vehículo. Cuando el aire caliente y húmedo del interior entra en contacto con las superficies frías de los cristales, el vapor de agua contenido en el aire se condensa en pequeñas gotas de agua, creando el efecto de empañamiento. Esto obstruye parcialmente la vista a través de los cristales.

• Menor luminosidad del día: durante la lluvia, la presencia de nubes y gotas de agua en la atmósfera actúan como filtro para la luz solar. Las nubes dispersan y absorben parte de la luz, lo que resulta en menor intensidad de la luz solar que llega a la superficie terrestre. 

• Menor longitud de alcance de los faros: Las gotas de agua en el aire durante la lluvia dispersan la luz emitida por los faros del vehículo, reduciendo la intensidad y alcance efectivo de los faros. 

• Luz reflejada en las gotas de agua o el suelo mojado: la luz se refleja en las gotas de agua presentes en el aire durante la lluvia debido al fenómeno de la reflexión. Cuando la luz incide en la superficie de las gotas de agua, parte de la luz se refleja en varias direcciones. Esto puede crear deslumbramiento y reflejos en el parabrisas y otras superficies del vehículo, afectando la visibilidad del conductor al dificultar la percepción adecuada de la vía y los objetos.

• Distorsión de la imágen proporcionada por los retrovisores: La lluvia en la superficie de los retrovisores puede causar distorsión en la imagen reflejada debido a la refracción de la luz. Las gotas de agua actúan como pequeñas lentes que cambian la dirección de los rayos de luz que pasan a través de ellas. Esto puede hacer que la imagen reflejada en los retrovisores se vea distorsionada, haciendo que los objetos parezcan más grandes, deformados o difuminados.

3. Favorece que surja la tensión: Aumento de fatiga visual y tensión al tratar de adivinar qué habrá más adelante.

Medidas para aumentar la seguridad en la conducción

Como conductor debes adoptar las siguientes medidas para mejorar la adherencia:

1. Mantener siempre los neumáticos en buen estado, a la presión correcta y con el dibujo adecuado en toda la superficie de rodadura para que se adhieran adecuadamente al pavimento. Los neumáticos desgastados no son compatibles con una conducción segura cuando llueve, al no tener dibujo, no se «agarran» bien al suelo y el agua y barrillo existentes en el pavimento no se evacúa a través de su delineado o canales de drenaje por lo que el vehículo puede perder la adherencia.

2. Comprobar con frecuencia durante la marcha si los frenos responden porque, al mojarse, pierden eficacia y hay que «secarlos». Para esto deberás, sin ánimo de frenar, presionar ligera y suavemente el pedal del freno, especialmente después de pasar por un charco, para que al poner en contacto las zapatas y los tambores o las pastillas y los discos, se produzca suficiente calor por rozamiento para evaporar la humedad, secándose y recuperando su eficacia.

3. Frenar de manera suave y mantenida, no de forma brusca, porque ello puede provocar el bloqueo de las ruedas y que el auto lejos de detenerse, patine. 

4. Frenar con más antelación de lo que se haría en condiciones normales. Al aumentar la distancia de frenado, que podría ser el doble de la que correspondería a una calzada seca, es necesario anticipar la acción sobre los frenos para prevenir la reducción de la adherencia de los neumáticos que la lluvia trae consigo.

5. Aumentar la distancia o intervalo de seguridad con el vehículo de enfrente para disponer de más espacio para frenar, debido a que aumentan las distancias de frenado y detención.

6. Reducir la velocidad, especialmente al aproximarse a curvas, tramos con asfalto brillante, charcos, barro, incluso hojas de árboles caídas, para mitigar la reducción de la adherencia de los neumáticos. Esta reducción es necesaria porque a mayor velocidad, más cantidad de agua y en menor tiempo deberán evacuar los neumáticos para mantenerse «agarrados» al asfalto, pudiendo en un momento llegar a saturarse los canales de drenaje de los neumáticos, lo que volvería más peligrosa la conducción.

Medidas a adoptar por el conductor para mejorar la visibilidad:

1. Encender luz antiniebla delantera, además de la luz de corto o largo alcance. La luz antiniebla delantera podrá utilizarse aislada o simultáneamente con la de corto alcance y con “las altas”. Esta última evítala al estar cerca (por detrás o de frente) de otros autos ya que causa deslumbramiento. 

2. Limpiar y mantener limpia toda la superficie acristalada del vehículo: parabrisas, ventanillas, luneta posterior, cristales y carcasas de todas las luces, espejos retrovisores para así ver y ser vistos mejor.

3. Poner en funcionamiento los limpiaparabrisas y, si el vehículo dispone de ellos, los limpia-faros y el limpia-luneta posterior.

4. Eliminar el vaho interior del parabrisas, ventanillas y luneta posterior, haciendo uso del sistema de climatización orientando el aire hacia la superficie acristalada. De no disponer el vehículo de dicho sistema, limpiar los cristales con una gamuza.

Si para limpiar los cristales fuera necesario inmovilizar el vehículo, hazlo en lugar permitido y seguro, además aprovecha para limpiar las placas de matrícula ya que, aunque no tienen la consideración de catadióptricos, al ser retrorreflectantes contribuyen a indicar la presencia del vehículo.

Precauciones especiales respecto los peatones

En días de lluvia, los peatones suelen realizar mayores conductas de riesgo como cruzar corriendo y sin mirar o caminar con una visibilidad disminuida por el uso de paraguas o capuchas para protegerse de la lluvia, pero estos elementos les causarán problemas para observar el tráfico. Asimismo, el uso de gabardinas aumenta, siendo el color más común de estas prendas gris o negro, colores que no les ayudan al momento de ser vistos, lo que te obliga a ti como conductor a ampliar tu atención a estos aspectos mínimos pero sumamente importantes, la anticipación es fundamental. 

Siguiendo estos consejos y manteniendo una actitud vigilante al circular, puedes reducir significativamente el riesgo y mantener tanto tu seguridad como la de otros usuarios de la vía. Recuerda que llegar a tu destino de manera segura es siempre la prioridad número uno.

Comparte este artículo con tus amigos y familiares para que lleguen con bien a su destino a pesar de las fuertes lluvias.

Si conducirás motocicleta en CDMX deberás portar una licencia especial, cuentas con las siguientes opciones: Licencia A1 –  Si conducirás únicamente motocicleta. Licencia A2 – Si además de motocicleta también conducirás automóvil. Licencia permanente – si eres de los afortunados que alcanzó a obtener este tipo de licencia, no tendrás que preocuparte por tramitar alguna de las primeras dos licencias, pues con la permanente podrás circular sin problema automóvil y motocicleta. 

Requisitos y documentos

1. Edad mínima: El primer requisito es tener al menos 18 años de edad. Los menores de edad no tienen permitido conducir motocicleta. 

2. Identificación oficial: Debes presentar en original un comprobante de identidad oficial, que puede ser tu credencial de elector (INE), pasaporte mexicano, cédula profesional con fotografía o Cartilla del Servicio Militar Nacional. Asegúrate que tu documento de identidad esté vigente, en buen estado y cuente con tu fotografía.

3. Comprobante de domicilio: Es necesario presentar un comprobante de domicilio reciente (no mayor a tres meses) o si la credencial para votar cuenta con el domicilio actual completo, se considerará como comprobante de domicilio. 
   • Podrá ser uno de los siguientes documentos:
   • Boleta del Impuesto Predial del Ejercicio Fiscal en curso
   • Estado de Cuenta de Servicio Telefónico Fijo 
   • Boleta del Servicio de Agua
   • Estado de Cuenta Bancario
   • Recibo del Servicio de Luz 
   • Recibo de Gas Natural

Ten en cuenta que el comprobante de domicilio o la credencial para votar deberán señalar los datos completos del domicilio, los cuales son calle, número, colonia, alcaldía, código postal. 

4. Comprobante de pago de derechos: Se realiza mediante línea de captura, la cual puedes obtener en el siguiente enlace: https://data.finanzas.cdmx.gob.mx/formato_lc/conceptos/licencias

5. Constancia de acreditación de evaluación: Ingresa en el siguiente enlace y elige el Centro Certificador de tu interés con base en costo, disponibilidad y tipo de documento que emiten: https://www.semovi.cdmx.gob.mx/tramites-y-servicios/vehiculos-particulares/motocicleta/licencia/centros-evaluadores

El paso a paso del trámite

Antes de iniciar el trámite, considera: Para obtener cualquiera de estas licencias es necesario contar con una Certificación avalada por CONOCER, en el Estándar de Competencias en “conducción del vehículo motocicleta para su uso en la vialidad”. Sin dicha certificación no podrás tramitar la licencia. Dicho lo anterior, los pasos a seguir son los siguientes:

1. Previo a iniciar el proceso de evaluación, te recomendamos realizar el curso: “conducción de motocicleta” impartido por SAENZ, para que obtengas todos los conocimientos teóricos y habilidades prácticas a fin de que adquieras sólidas bases para realizar la certificación. No importa si llevas años conduciendo motocicleta o nunca te has subido a una, en SAENZ recibirás capacitación a tu nivel para que apruebes la evaluación. 
2. Al concluir el curso de manejo y previo a presentarte a tu evaluación y certificación, es importante que realices una prueba diagnóstico similar a la que se aplicará en el proceso de certificación, lo que te permitirá confirmar que estás lista o listo para acudir al centro evaluador de tu elección (este paso es opcional).
3. Realiza tu certificación: Ingresa aquí y elige el Centro Certificador de tu elección. 
4. Ya que aprobaste la evaluación, los centros evaluadores notificarán a SEMOVI cuando te encuentres certificado mediante tu CURP; posteriormente, la Secretaría de Administración y Finanzas habilitará la línea de captura asociada a dicha CURP.
5. Descarga el formato de pago para el trámite de tu licencia: ingresa a la página del Formato Múltiple de Pago de la Secretaría de Finanzas, y genera tu línea de captura para el pago de: Licencia Tipo A1 o Licencia Tipo A2.
6. Realiza tu pago en los Centros de Servicio de la Secretaría de Administración y Finanzas o Auxiliares de pago autorizados, conserva el comprobante de pago de la línea de captura (es parte de la documentación para asistir a SEMOVI).
7. Solicita tu cita aquí para asistir al Módulo de Control Vehicular y Licencias de tu preferencia: Deberás contar con la CURP y un correo electrónico válido al que tengas acceso.
8. Acude a la cita con 15 minutos de anticipación y lleva contigo los documentos en original y copia enumerados al principio del presente artículo.
9. Lee cuidadosamente el documento emitido por el operador del módulo de atención para revisión.
10. ¡Ya cuentas con tu licencia! Te será entregada al momento.

En el mundo dinámico de la conducción de motocicleta, la preparación es la clave para la seguridad. Como motociclista, recuerda que la adquisición de tu licencia es solo el primer paso. Una conducción segura requiere mucho más que solo saber mover la motocicleta, la capacitación constante en centros especializados es clave para tu desempeño: la enseñanza en estos centros va más allá de la reglamentación vial, aprenderás de forma práctica sobre la dinámica del vehículo, transferencias de peso, cómo actúan las fuerzas G sobre tu conducción, técnicas precisas de frenado, maniobras complejas, toma correcta de curvas y demás conceptos de física aplicada a la conducción de motocicleta que de otra manera no podrías aprender, llevando la comprensión de la moto a un nivel más profundo y equipando a los motociclistas con habilidades sólidas y un entendimiento completo. 

Revisa nuestros cursos de conducción de motocicleta que tenemos para particulares o para flotillas. 

En Ciudad de México, el proceso para obtener el permiso de conducir está diseñado para quienes tienen 15, 16 o 17 años, otorgándole al jóven conductor la oportunidad de aprender las bases de la conducción antes de adentrarse en la experiencia completa de manejar. Acompáñanos a lo largo de esta guía, donde explicaremos el proceso paso a paso para obtener el permiso y mostraremos cómo Escuela de Manejo SAENZ brinda la constancia esencial que se necesita para tramitar el permiso de conducir. 

Requisitos y documentos:

1. Constancia del curso de manejo del menor, original: como primer requisito, te solicitarán un documento que haga constar que cursaste y aprobaste un curso de manejo en alguna escuela de conducción registrada en SEMOVI, aquí es donde entra en juego SAENZ. Al aprobar satisfactoriamente nuestro plan de estudios, respaldaremos tu habilidad y responsabilidad para conducir, otorgándote una “constancia oficial de manejo”, sin ella, no podrás tramitar el permiso. Más abajo te indicaremos cómo puedes inscribirte al curso y obtener dicha constancia. 

2. Identificación oficial del menor de edad: presentar en original un comprobante de identidad oficial, que puede ser la credencial de tu institución educativa, el pasaporte mexicano o la credencial de alguna Dependencia Oficial. Asegúrate que tu documento de identidad esté vigente, en buen estado y cuente con tu fotografía.

3. Comprobante de domicilio: debe ser reciente, no mayor a tres meses y deberá señalar los datos completos del domicilio, calle, número, colonia, alcaldía, código postal. Podrá ser uno de los siguientes documentos:
   • Boleta del Impuesto Predial del Ejercicio Fiscal en curso
   • Estado de Cuenta de Servicio Telefónico Fijo 
   • Boleta del Servicio de Agua
   • Recibo del Servicio de Luz 
   • Recibo de Gas Natural

4. Acta de nacimiento del menor de edad: no debe contener alteraciones, tachaduras ni enmendaduras.

5. Identificación oficial de padre o madre: alguno de tus padres debe acompañarte a realizar el trámite y llevar consigo su identificación oficial, la cual puede ser su credencial de elector (INE), pasaporte mexicano, cédula profesional con fotografía o Cartilla del Servicio Militar Nacional. Igual que tú, debe asegurarse que su documento de identidad esté vigente, en buen estado y cuente con su fotografía.

6. Pago: Se realiza mediante línea de captura, la cual puedes obtener en el siguiente enlace: https://data.finanzas.cdmx.gob.mx/formato_lc/conceptos/licencias

El paso a paso del trámite

1. Realiza el curso de manejo en Escuela de manejo SAENZ.
2. Ingresa a la página de la Secretaría de Administración y Finanzas de la Ciudad de México, clic en “Tránsito”, selecciona “Permiso de Conducir con Vigencia Única (expedición y reposición)” e imprime la línea de captura.
3. Realiza el pago de la línea de captura. Conserva el comprobante de pago original y la línea de captura.
4. Saca tu cita en alguno de los Módulos de Control Vehicular y Licencias. Recuerda que sin cita no te atenderán. Aquí puedes realizar la cita: https://llave.cdmx.gob.mx/oauth.xhtml?client_id=202006240204514573&redirect_url=https://app.semovi.cdmx.gob.mx/citas/inicio. 
5. Llenar y firmar el manifiesto que entregará Atención Ciudadana al padre, madre, tutor o quien ejerza la patria potestad al momento de hacer el trámite.
6. Finalmente, ¡recibirás tu permiso!

¿Cómo obtener la constancia oficial de SAENZ?

• Inscripción: Regístrate al curso de manejo, puedes realizar el registro en línea o en nuestras instalaciones. Aquí te dejamos el enlace con todo el detalle sobre los cursos que impartimos para menores de edad.
• Asistencia: Asiste a todas las clases teóricas y prácticas requeridas, en donde experimentados instructores te guiarán en tu proceso de aprendizaje adaptándose a tu nivel de habilidad, pues las clases prácticas son 100% personalizadas.
• Evaluación: Supera los test teóricos y prácticos diseñados para medir tus habilidades de manejo antes, durante y al concluir el curso. 
• Constancia: Una vez hayas completado con éxito el curso, SAENZ te otorgará una constancia que podrás presentar como parte de tus documentos para obtener el permiso de conducir.

Sanción por circular sin permiso de conducir

El artículo 44 del Reglamento de Tránsito de la Ciudad de México, en su fracción primera inciso a, establece que se sancionará con una multa equivalente a 10, 15 o 20 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA) vigente, sin menoscabo de lo estipulado por la Ley y su reglamento respectivo. Consulta en el siguiente enlace el valor actual de la UMA https://www.inegi.org.mx/temas/uma/. ¡Atención! No amerita remisión del vehículo al depósito vehicular (corralón), para conductores de vehículo de uso particular. 

En Escuela de Manejo SAENZ estamos comprometidos a brindarte no solo la constancia necesaria, también las herramientas esenciales para que te conviertas en un conductor seguro y consciente. Recuerda que obtener tu permiso de conducir no es el final del camino, todo lo contrario, este camino apenas comienza. A lo largo de él tendrás que seguir preparándote, pues la seguridad vial evoluciona constantemente y tu papel es mantenerte al día con las actualizaciones para ser un agente activo que suma a favor de un entorno vial seguro.

Comparte este artículo con tu mejor amigo y vivan juntos la experiencia de convertirse en conductores SAENZ 

Obtener una licencia de conducir es un paso fundamental para aquellos que desean moverse por la Ciudad de México de manera independiente y segura. Es importante tener en cuenta que hay ciertos requisitos y trámites que debes cumplir antes de obtener tu licencia. En este artículo, te proporcionaremos toda la información necesaria para que puedas obtener tu licencia de conducir en la Ciudad de México de manera exitosa.

Antes que nada, debes tener en cuenta que existen diferentes tipos de licencias para conducción de vehículos particulares, son las siguientes: Licencia tipo A: para conducción de automóvil. Licencia tipo A1: autoriza conducir motocicleta. Licencia tipo A2: permite a su propietario conducir automóvil y motocicleta. En este artículo explicaremos el proceso para obtener la licencia tipo A por primera vez:

Requisitos y documentos:

• Edad mínima: El primer requisito es tener al menos 18 años de edad. Sin embargo, si necesitas conducir y aún no eres mayor de edad, no te preocupes, puedes obtener el permiso de conducir desde los 15 años. Si te interesa obtener tu permiso de conducir, estás en el lugar correcto, revista nuestro curso para menores de edad o nuestro artículo “¿cómo obtengo mi permiso de conducir?” [agregar link a artículo del blog.
• Identificación oficial: Debes presentar en original un comprobante de identidad oficial, que puede ser tu credencial de elector (INE), pasaporte mexicano, cédula profesional con fotografía o Cartilla del Servicio Militar Nacional. Asegúrate que tu documento de identidad esté vigente, en buen estado y cuente con tu fotografía.
• Comprobante de domicilio: Es necesario presentar un comprobante de domicilio reciente (no mayor a tres meses) o si la credencial para votar cuenta con el domicilio actual completo, se considerará como comprobante de domicilio. Podrá ser uno de los siguientes documentos:
  • Boleta del Impuesto Predial del Ejercicio Fiscal en curso
  • Estado de Cuenta de Servicio Telefónico Fijo 
  • Boleta del Servicio de Agua
  • Estado de Cuenta Bancario
  • Recibo del Servicio de Luz 
  • Recibo de Gas Natural

Ten en cuenta que el comprobante de domicilio o  la credencial para votar deberán señalar los datos completos del domicilio (calle, número, colonia, alcaldía, código postal). 

• Pago: Se realiza mediante línea de captura, la cual puedes obtener en el siguiente enlace: https://data.finanzas.cdmx.gob.mx/formato_lc/conceptos/licencias

Dónde puedes realizar el trámite

Podrás solicitar tu cita en alguno de los Módulos de Control Vehicular y Licencias

Recuerda que, sin cita, no serás atendido.

El paso a paso

1. Ingresa al sitio web de la Secretaría de Administración y Finanzas de la Ciudad de México, clic en “Tránsito”, selecciona “Licencia A automovilista por 3 años (expedición y reposición)” e imprime tu línea de captura.
2. Realiza el pago de la línea de captura. Conserva el comprobante de pago original y la línea de captura.
3. Obtén tu cita en alguno de los Módulos de Control Vehicular y Licencias. O acude al Centro de Servicio de Tesorería más cercano a tu domicilio. 
4. Acude con los documentos originales para realizar tu trámite en el establecimiento que elegiste al momento de generar la cita. Deberás acudir puntual y sin acompañantes.
5. En ventanilla se recibirá, revisará, cotejará y registrará la documentación y la persona que te atienda emitirá y entregará la hoja de validación de datos para tu firma de conformidad con la información contenida.
6. Finalmente, ¡recibirás tu licencia!

Sanción por circular sin licencia de conducir

El artículo 44 del Reglamento de Tránsito de la Ciudad de México, en su fracción primera inciso b, establece que se sancionará con una multa equivalente a 10, 15 o 20 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA) vigente, sin menoscabo de lo estipulado por la Ley y su reglamento respectivo. Consulta en el siguiente enlace el valor actual de la UMA https://www.inegi.org.mx/temas/uma/. ¡Atención! No amerita remisión del vehículo al depósito vehicular (corralón).

Recuerda que obtener la licencia no es el fin del camino, todo lo contrario, ¡apena comienza!: Tu responsabilidad como conductor va más allá de obtener una licencia, es un compromiso continuo para contribuir a un entorno vial seguro y armonioso para todos. No te confíes y continúa capacitándote.